Coincidencias

General Summary

El denso polvo recién comenzaba a asentarse. Similar al ulular de los Autillos que arrullan a los enamorados en sus balsas, la madera crujía en el fondo acompañando el frenético movimiento de un Flek convulsionante, sus ojos, poseídos completamente por la esclerótica apuntaban a un mundo lejano tan distante de la realidad como ahora Senifini de aquella pequeña casa que servía de guarida para el grupo, un reflejo del inconsciente quizás o simplemente los traumas saliendo a la superficie en un momento de tensión, todo a su alrededor pasó de ser una pequeña mazmorra en las profundidades de una casa señorial a una larga calle de un sitio irreconocible, etéreo, expectante, un estruendo a la lejanía llamó su atención, una cuadrilla de guerreros luchando contra seres sombríos que surcaban los cielos, de ojos rojos y cuerpo amorfo fueron fáciles de reconocer, un flagelo restallo a su lado, la carne se desgarraba con cada oscilación del brazo, seres arrodillados entregados al dolor, a su espalda, solo desolación, una vista del pasado, el presente y un posible futuro, una obra de teatro de mal gusto, era mejor cerrar los ojos y ceñirse a una oscuridad propia que mantenerlos abiertos y contemplar la negrura mas profunda destruyendo sin proposito alguno, todo menos el dolor era irreal, un resplandor de color verde perforo el vientre de Flek desintegrando su cuerpo en pequeñas particulas de polvo mientras veia a la lejania como una manta se abalanzaba hacia él.

Flek abrió los ojos. Todos estaban a su alrededor, expectantes, a su espalda Zet’ intentaba mantener su cuello en postura para evitar lesiones por los espasmos, todos los demás pintados de blanco culpa de los escombros liberados por la demolición de la casa, incluso con su cabeza bailando en otro plano el S’fie no tuvo problema de acicalar a sus compañeros con el chasquido de sus dedos. ¿Siguiente víctima?: Muktan. El dracónido era el unico que podia leer la hoja de papiro con la inscripción que Zet’ había calcado con un trozo de carbón, lo escrito, también culpable de las convulsiones del Tabaxi era inteligible para todos, quizá después de transcrito en papel había perdido su magia, tomando una pizca de sal y hollín de su bolsa de componentes, entorno sus ojos y lanzó el conjuro que le permitiría…golpear el suelo con su cabeza en medio de agitados movimientos, su ojo derecho no pudo soportar la presión de su cráneo y se liberó en una lágrima de sangre junto antes de perder el conocimiento, nadie más intentaría leer aquel maldito papel.

Encomendados ahora solo a buscar guía en Lerman, el grupo se dispuso a esperar a su compañero inconsciente y tomar un merecido descanso protegidos como de costumbre por la abjuración del mago, reconfortados dispusieron a revisar los elementos encontrados en lo que otrora fue una casa de tres pisos, ahora solo polvo y astillas. Papeles intercambiables por oro, ¿tenía algún sentido?, no para Zet’, pero eso era lo que habían encontrado en una de las camaras junto a un juego de placas y joyas de color verde. El dracónido despertó mucho después de lo que lo hizo Flek en su momento, Calipso de noble corazón se encargaba de vigilar el cuerpo que recién intentaba ponerse en pie, que buscando algo que beber, se aferró a la bota del Subrido repleta de vino hasta olvidar por completo el dolor de su cuerpo por culpa de su borrachera.

El bárbaro advirtió algo fuera del recinto, sin dudarlo dos veces corrió a advertirle al grupo de la amenaza que los acechaba: un águila sobrevolando el lugar, eso era todo. Como era de esperar ninguno de sus nuevos compañeros decidió darle importancia a un ave que deambulaba campante por una zona llena de roedores, pero…viendolo bien, si parecia tener un comportamiento sospechoso, un ave que se detenía en la inmensidad de Abjanel justo a mirar el sitio donde habían criatura no era tan natural como se suponía a la primera, lo importante aquí era hacer respetar los códigos, ave muerto, abono para el huerto, en un arrebato de nostalgia recordando las épocas de supervivencia en Senifinil, Zet disparó tres proyectiles mágicos hacia el animal que se desplomó contra el suelo en un grito sordo mientras, sorprendentemente se transformaba en una criatura humanoide que en medio de espasmos frenéticos intentando apresar el aire golpeó la superficie desde las alturas.

Todos desenfundaron, nadie podía saber cuánto tiempo había pasado esta criatura observándolos desde las alturas, quizá era esa la última pieza de información que le faltaba al grupo para poder dar con el objetivo de aquella mascota por la que estaban allí en primer lugar.La criatura era un humano de edad media , 1.75 de altura, ojos café oscuro, de piel trigeña, barba bastante pobre acompañando un cabello a la altura del cuello de color castaño oscuro, madera muy fina semejante a una armadura de color azul metálico ópaco cubria su cuerpo forrado por una capa que le servia de capucha, en la mano derecha se podia ver un guante, en su reverso habia tallada una ola, una luna y dos circulos a los lados. Este era un trabajo para Zet’, al principio cordial, amable, pero a medida que sus preguntas no encontraban sitio en la cabeza del espía su tono comenzó a volverse más turbio hasta el punto que se vio obligado a usar medios más agresivos para hacerlo hablar. luego de una tortura, mas piscologica que fisica el humano habló, su nombre era Kradmus y venia mas allá del mar siguiendo a una criatura llamada Maedras, su busqueda lo llevo a encontrar en Abjanel a un tabernero que habia huido en esta direccion, decia la verdad. 200 piezas de oro ofreció el desesperado hombre para que Zet’ y Flek accedieran a ayudarle, un trabajo rentable sin duda, apuntó la dirección en la que según él, había visto recientemente a su objetivo y en un abrir y cerrar de ojos, con la magia del Tabaxi, estaban en el lugar propiamente dicho persiguiendo por los aires a una criatura que intentaba escapar volando, los medios mágicos todo lo pueden, y en cuestión de pocos segundos ya los dos aventureros estaban arremetiendo contra la criatura con sus hojas que se desplomó hacia el suelo en caída libre.

Coincidencias, la criatura era un elfo llamado Lazet, trabajaba para una organización que trabajaba en los bajos fondos de Abjanel, su misión era entregar misiones transitorias, un puente entre la orden y su gente, había escapado buscando una casa de seguridad en la zona, pero, sospechosamente no podía encontrarla, quiza, solo quiza, porque ahora estaba completamente derrumbada.

Fecha Eiláar
Quamón 16 del 4 CH época novena
Campaign
El Olvido Creador
Protagonists

Dante Ojosacro

Neutral Aasimar (Hermit)
Fighter 8
84 / 84 HP
STR
18
DEX
11
CON
18
INT
10
WIS
11
CHA
9
Report Date
12 Dec 2023

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