Éste es el mundo de Chöra. Hace centenares, o incluso miles de años, los humanos cometieron un crimen imperdonable. En el albor de su civilización descubrieron y perfeccionaron la magia. Cegados por este descubrimiento y creyéndose superiores a las fuerzas de la naturaleza y a los Dioses, desataron una Catástrofe. Su pecado trajo a este mundo a los Trela, criaturas monstruosas, hechas de sombras y con ojos color púrpura brillante. Los humanos los combatieron y consiguieron alguna pequeña victoria al inicio de la guerra. Sin embargo, pronto descubrieron lo insignificantes que eran en comparación con su enemigo. Los Trela se multiplicaban a gran velocidad y, mucho peor, se alimentaban de la magia y evolucionaban y crecían rápidamente. En poco tiempo la humanidad fue aplastada y casi destruida por completo. El Creador se apiadó de los humanos y envió en su ayuda a sus hijos, los gloriosos Argrim, humanoides titánicos con piel del color del cielo azul y cabello, brazos y piernas de cristal. La luz de los divinos rechazó a las criaturas del averno. No las destruyó por completo, pero las hizo retroceder y esconderse entre las sombras. Durante cientos de años, los Argrim han protegido y gobernado sabia y justamente a los humanos a su cargo pero los Trela, en la oscuridad, seguían evolucionando…