Asiento de la Primera Generación de Judíos

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Vinculados a la llegada del legendario rey Pirro, o bien a la mítica campaña de Nabucodonosor de Babilonia en la Península, se habla de la instalación de los judíos de la Diáspora de Babilonia en Toledo, como regalo de Nabucodonosor a este aliado suyo, Pirro.

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El asiento de Hebreos en España

Se cuenta más adelante que por ser por estos Hebreos hombres muy sabios en diversas ciencias y muy industriosos, que vinieron a aprender de ellos muchos de sus comarcas, a quien enseñaron diversas cicencias, no habidas hasta entonces en España, por lo que fueron muy estimados, diciendo más, que estos Hebreos edificaron entonces en esta ciudad el antiquísimo templo llamado Santa María la Blanca, que fue el segundo templo que ellos tuvieron en el mundo, contando el primero, por el de Jerusalén. Para esta edificación, trajeron mucha cantidad de tierra de Jerusalén, añadiendo más en las dichas Crónicas, que por haber venido estos Hebreos a España, tantos años antes de la pasión de nuestro señor Jesucristo, y por no haber consentido en ella, por fin, ni por sus embajadores, que en en jerusalén tenía, fueron libres y francos de un cierto tributo que todos los otros Hebreos, dispersos, pagaban a sus señores, y por fortificar más su razón, escriben que después de venidos estos Hebreos a España, pusieron nombre a lugares que stán en torno a esta ciudad, llamados: Maqueda, Escalona, Noues (Nobe) y Yepes, que viene de Yope, y Aceca, Collis Aquile que es el cerro del Águila, de que en la escritura santa se hace mención que están casi a la misma distancia de Jerusalén. Los cuales lugares dicen que se poblaron después venidos a España estos Hebreos. Y como quiera que así esto como otras cosas tocantes a ello, están escritas en los libros que de esto tratan y platican.   La verdad es que ello no pudo pasar de la manera que en ellos se escribe: lo unp porque se tiene por cierto que en España no reinó rey que se llamase Pyrrus, lo otro porqe no conviene en tiempo, el que se escriben que reinó el dicho rey Pyrrus con el que aconteció la dicha cautividad de Jerusalén, con mucho número de años. Por manera que pues no se pudo fallar a ella presente, bien se prueba que esto no los pudo traer consigo a España. Y así podremos decir, que si estos Hebreos vinieron tan antiguamente a España, como muchos afirman, y que algunos de ellos asentaron cerca de esta ciudad, y dieron nombre a los dichos lugares, por el de otros del mismo nombre, que en sus tierras dejaron, que es más cierto que los trajo a España, Nabucodonosor, rey de Bablonia (segundo de este nombre) que otro ninguno, el cual vino a España, según lo prueba Flavio Josefo en el décimo libro De las Antigüedades, y en el Contra los griegos.   Y según lo escribe de los gentiles Estrabón en su 15º libro y aún parece que lo siente Plinio, en el tercer libro de su Natural Historia donde dice que vinieron a España: los Persios que pudo ser quienes hubiera traído este rey Nabucodonosor, cuyos vasallos eran al tiempo, que ella vino y aún algunos piensan que poblaron entonces la ciudad de Córdoba, y que la llamaron Cordusa, por otra ciudad de Persia así llamada de donde eran naturales, la cual ciudad fue mucho tiempo después acrecentada por el consul Marcelo, como Estrabón escribe.   De manera que concluyendo esto, podremos decir que si es verdad que estos Hebreos vinieron tan antiguamente a España, que los trajo el mismo rey Nabucodonosor antes que otro ninguno, aún que se tiene por cierto que los que con el dicho Nabucodonosor por entonces vinieron, fueron pocos: puede se creer que después, sabiendo la seguridad en que vivían los que acá estaban, y la reputación en que eran tenidos, se vinieron otros muchos a estar con ellos, que hicieron lo que hemos dicho, lo cual parece que se prueba también por un epitafio antiquísimo que en nuestros tiempos se halló en Monvedre, debajo de un muro antiguo en lengua Hebrea, que tornado en latín, decía: HiC iacet Adonyan, praepositos tributorum regis Salomonis, y que en romance quiere decir: "Aquí yace Adoniran recaudador de los tributos del rey Salomón".   Y como quieran que estos Hebreos vinieron a España, tan antiguamente como hemos dicho, en el tiempo que reinó en ella el rey Sisebuto de los Godos, a.D. 610 fueron por fuerza convertidos a nuestra santa fe católica, a lo cual fue este rey inducido por ruegos del emperador Heraclio, que sabiendo de sus adivinos que había de ser vencido y deshecho por los circuncidados, creyendo que eran los judíos, procuro que en todas partes donde los había fuesen por fuerza o por grado convertidos a nuestra santa fe católica, aunque por esto no pudo huir lo estaba contra él ordenado, que a la fin fue por los Moros, que son circuncisos, deshecho y vencido. Y aunque esta conversión de los judíos comenzó en tiempos del rey Sisebuto, parece que se vino después a acabar en tiempos del rey Recisiudo, año del señor de 664. Y aun que esto paso así en la conversión de los hebreos, el perverso rey Vitiza los tornó a meter en España en daño y destrucción de sus moradores.