Alatkanianos

Razgos

Los alatkanianos son una etnia humanoide, similar a los elfos en cuanto a razgos faciales delicados, pero que están adaptados para vivir tanto debajo del agua como sobre la tierra (Elfo marino). El color de su piel varía: va desde azules, verdes, grises, e incluso en algunos casos marrones. También pueden ser más o menos oscuros. Tienen ojos más grandes que los elfos normales y estos también suelen ser de colores azules, verdes o grises, generalmente bastante brillantes y penetrantes. Tienen branquias en la base del cuello que conectan directamente a un órgano filtrador, pero también tienen narices que, cuando están dentro del agua, se cierran completamente, pero que utilizan en las ocasiones en las que deben salir a la superficie.

Algunos alatkanianos desarrollaron finas capaz de escamas que recubren algunas partes de sus cuerpos, como la espalda, los brazos o las piernas, o incluso la cabeza, y suelen centellar cuando reciben los rayos del sol a través del agua. Fuera del agua, estas escamas son totalmente opacas y suelen aparentar un color más oscuro que el que muestran bajo el agua. También poseen membranas en manos y pies que les permiten nadar a una gran velocidad; los mejores nadadores suelen tener también aletas en la cabeza o la espalda.

Origen

Antiguamente se cree que compartían lazos directos con los elfos terrestres, pero en algún punto sus hermanos fueron separados y desarrollaron los razgos que ahora los diferencian. La leyenda dice que esto se debió a una maldición, la misma que hundió la ciudad y que condenó a los ciudadanos a jamás poder abandonarla y aislarse del resto del mundo.

Cultura

Los alatkanianos son una etnia que vive bajo el agua, aislada del resto de las culturas, con un único lazo al exterior: sus hermanos vepokanianos (ver Vepo Ka'n y Alát Ka'n). Es por ello que son bastante desconfiados de los extraños, especialmente de cualquier otra raza que no sea élfica, ya que solo conocen la existencia de otros humanoides gracias a los textos; unos pocos sabios han logrado salir de Alát Ka'n con el fin de documentar el mundo exterior para aumentar el tamaño de sus enormes archivos y estar al tanto de lo que los cambios en el mundo. Solo permiten que unos pocos vepokanianos entren en la ciudad con fines diplomáticos o académicos, y a pesar de que estos tienen que demostrar fiabilidad, nunca bajan la guardia.

Son naturalmente cautelosos, aunque curiosos, y analizan larga y tendidamente los problemas que se le presentan. Todos los alatkanianos reciben educación desde el nacimiento, ya que consideran que su civilización perdurará impoluta por los siglos venideros si no permiten que sus conocimientos y la historia de su pueblo se contamine o distorcione. Son muy rigurosos con la educación y el orden.

A pesar de que uno de sus principales valores es mantener su civilización pura y su cultura viva, no desdeñan a ninguna otra raza en particular (tal vez porque solo han tenido contacto con otros elfos, con valores muy similares a los suyos). Sin embargo, y a pesar de no ser imposible, es un suceso extremadamente raro que admitan a otra raza a su ciudad y les otorguen el nivel de ciudadano. Esto podría suceder solo si el sujeto en cuestión demuestra tener intensiones puras, comportamiento intachable y valores admirables.

Milicia

Alát Ka'n no ha sido partícipe en ningún conflicto en cientos de años; si alguna vez estuvo en guerra, posiblemente ocurrió antes de la calamidad que hundió su ciudad en las profundidades. Conocimientos sobre esta época está relegada a los más excelsos eruditos que custodian los anales más antiguos. Sin embargo, esto no es motivo para que Alát Ka'n no tenga en cuenta la posibilidad de un ataque enemigo, y ellos jamás bajarían la guardia.

Los alatkanianos eligen a los más jóvenes cuando comienzan a desarrollar sus razgos; algunos nacen con aletas que les dan ventaja a la hora de nadar a gran velocidad, y estas se abren cuando los alatkanianos llegan a la edad de maduración. Estos jóvenes son seleccionados para convertirse en la guardia de la ciudad y el ejército. Entrenan rigurosamente sus cuerpos y llevan sus capacidad al extremo para lograr soldados élite, hábiles con los arpones, las redes, jabalinas (e incluso se sabe de algunos extraños explosivos que pueden aturdir a los enemigos bajo el agua) y pueden nadar hasta 40 pies de distancia en un turno.