El plano feérico

El Plano Feérico es un reino de suavidad lumínica y maravillas, un lugar donde la música se entrelaza con la muerte. Este reino se encuentra sumido en un crepúsculo eterno, donde luces encantadas oscilan con gracia en la brisa y luciérnagas regordetas revolotean entre los bosques y campos. El cielo se ilumina con los tenues colores de un crepúsculo imperecedero que nunca llega a completarse; un sol inmóvil en el horizonte. Más allá de los asentamientos, gobernados por los feéricos Seelie que forman la Corte del Verano, la tierra se transforma en un intrincado laberinto de zarzas afiladas y pantanos melosos, un territorio perfecto para que los Noseelie emerjan en busca de su presa.

El Plano Feérico existe en paralelo al Plano Material, en una dimensión alternativa que comparte el mismo espacio cosmológico. Este lugar refleja el paisaje del mundo natural, pero lo transforma en formas espectaculares al reflejarlo. Los Buscadores hicieron su primera entrada en este plano a través de la Travesía Feérica situada en el lago del Bosque Verde, con la noble intención de salvar dicho bosque.