Grieta de Cristal

Otra expedición volvió de la Grieta sin resultados. En los seiscientos cincuenta y siete años que llevo en este mundo nunca he visto a nadie llegar al final de la Grieta de Cristal. ¿Que quereis intentarlo? Los enanos del norte, mucho antes de la desaparición de su civilización lo intentaron. ¿Adivina qué? Fallaron. Parma ha enviado decenas de expediciones, incluso antes de la Noche Negra. Fallaron. Ni hablar de los reinos humanos... las pocas caravanas que han mandado hasta la Grieta ni siquiera lograron salir de vuelta. No sé que esconde en sus profundidades, y dudo que alguien a estas alturas de la Tercera Era tenga la capacidad de averiguarlo. Después de todo, ni siquiera con magia los archimagos de Parma han podido visualizar el fondo de la Grieta. Al menos las menas de gemas han sido útiles. ¿Pero nunca se han preguntado por qué, en un lugar tan inhóspito y aislado, crecen cristales con tanta energía mágica? Algo hay allá abajo, algo antiguo...
(Saelethil Erhorn, antigua residente de Nueva Parma)

El Imperio Élfico del Sudeste del Mundo

Desde las primeras eras de Lov, una de las razas más importantes y antiguas ha sido la de los elfos. Poseedores de una increible afinidad mágica y un hambre de conocimiento, los elfos buscaban constantemente descubrir los misterios de la magia y el mundo en que vivían. Para esto, se organizaron alrededor de un proliferante valle en el sudeste del mundo, lejos de los reinos de los enanos y los humanos. Con su dominio arcano y años de trabajo y ardua labor, la ancestral raza fundaría la ciudad más grande de Kreinvulqo, el oasis del conocimiento histórico y arcano y un paraíso no sólo para los elfos del mundo, sino para todos aquellos que compartieran su amor por los incontables secretos que el mundo poseía: la ciudad élfica de Parma.
Sin ninguna otra raza mortal con quien competir por los recursos de este lado del continente, Parma crecería hasta proporciones masivas, con torres que alcanzaban el cielo y magnificentes monumentos a la magia. Desde la ancestral ciudad, elfos y gnomos exploraban los misterios de lo arcano, descubriendo nuevos conjuros y conectándose de maneras nuevas y desconocidas con las energías mágicas del mundo. Sin embargo, su hambre de conocimiento no podía limitarse a su magnánima ciudad. Diversas expediciones empezaron a recorrer todos los rincones de este lado de Kreinvulqo, ansiosos por ser los primeros en encontrar las maravillas naturales que este plano les podía ofrecer.

El Camino Cubierto en Niebla

Las expediciones de los elfos a lo largo del territorio eventualmente dieron con una valle lleno de espesa niebla, donde la visibilidad se reducía a tal punto que aquellos que entraban no podían ver sus propias manos. Guardado por extrañas bestias cuyas facciones eran imposibles distinguir ante tal gruesa bruma, pocas caravanas perseveraban en su camino hacia el otro lado, y menos aún lograban sobrevivir. Decenas de caravanas, cada una más preparada que la anterior, se aventuraban hacia los interiores de este nubloso valle para volver a Parma completamente heridos y demacrados, si es que volvían. Las misteriosas Bestias de la Bruma disuadieron por mucho tiempo a la mayor parte de la población de seguir adentrándose en ese rumbo, pero no faltaban aquellos cuya curiosidad les superaba.
Sin embargo, cuando una de ellas lo logró, fue recibida por una visión impresionante: pilares gigantescos de cristal, con colores tan vívidos como los del arcoiris se alzaban alrededor de un gigantesco abismo hacia las profundidades de Lov. Cuando los investigadores y magos miembros de la caravana inspeccionaron estos cristales, se dieron cuenta del impresionante potencial mágico que contenían. No sólo poseían naturalmente poderosas energías mágicas dentro de sí, sino que tenían la capacidad de almacenar gigantescas cantidades de magia en su interior. En contraste, las gemas más poderosas que existían, las gemas de alma, no poseían ni un tercio del potencial de estos cristales, sin contar las legendarias piedras de alma negra. Los elfos habían encontrado una metafórica mina de oro, y estaban dispuestos a aprovecharla al máximo.

El Misterio Inaccesible para los Mortales

Con el tiempo, más y más elfos iniciarian incursiones hacia la zona, preparados para lidiar con los extraños seres cubiertos de cristal que vivían dentro de la niebla. Iniciando fuertes emprendimientos mineros y ansiosos por aprovechar los poderosos cristales para beneficio de su civilización, los elfos lentamente fueron adentrándose en las profundidades de la Grieta. Sin embargo, los peligros de las cuevas eran aún mayores que los del exterior. Enormes gusanos cristalinos, monstruosidades del tamaño de montañas cubiertas de espinas, poderosos elementales de tierra, hidras de incontables cabezas, ancestrales dragones de cristal e imponentes colosos de acero que parecieran defender el camino volvían al natural y cristalino laberinto imposible de recorrer para cualquier mortal. Desgraciadamente, esto sólo alimentó la curiosidad de los elfos, conocidos por su impetú en descubrir los misterios del mundo.
Actualmente, rumores se han esparcido a lo largo de Kreinvulqo respecto a lo que existe en las profundidades de la misteriosa cueva. Algunos creen que podría ser el hogar de un dios dormido, esperanzados de que el secreto de la divinidad se encuentra oculto bajo tierra. Otros son más simples, simplemente esperando montañas de riquezas y objetos mágicos de tiempos antiguos esperando a ser descubiertos. Todos los mortales que han intentado llegar al final de la Grieta han fallado, y con poderosas fuerzas rápidamente ejerciendo su influencia en el continente y las extracciones élficas adentrándose cada vez más hacia las profundidades, es cuestión de tiempo para que un mortal desentierre los misterios que se encuentran al final de la Grieta de Cristal.

Tipo

Cave System