En el principio, solo existían las fuerzas primordiales. Gracias a los primeros Kruziik y el choque de las fuerza primordiales, se creó el plano material y los planos de los seres superiores. Con el paso del tiempo, las divinidades decidieron mantener la vida en Lov y se convirtieron en los primeros habitantes del mundo. Sin embargo, no fueron los únicos allí. Los Nikruziik también fueron proliferando en sus propios planos y durante todo este tiempo han observado con codicia el mundo de los dioses: el plano terrenal. Después de mucho tiempo, después de las primeras civilizaciones de elfos y humanos, el plano terrenal ahora es hogar de una gran variedad de pintorescas razas y especies. El bien y el mal también se ha esparcido y los tonos de grises, en cuanto a moralidad, se han establecido con el paso de las generaciones y la perdida de la divinidad de los primeros habitantes. No solo la vida misma ha proliferado en el mundo. También se cuenta en rumores y cánticos de juglares en las tabernas, que oscuras ruinas y viajes involuntarios a planos oscuros son pan de aventureros valientes o tal vez muy tontos para buscar este tipo de desafíos.