Sesión 01: Prólogo 1

Hace tres días, el puerto de Waterdeep vió zarpar a un enorme navío conocido como el Escarlata Errante en un viaje de cinco días con destino a Alaron. En su interior se encuentran cinco desconocidos que han iniciado su viaje por distintas razones.

Un Dragonborn Paladín cubierto de cicatrices ve interrumpidas las cavilaciones sobre sus ideales por un disturbio en la cubierta: un semiorco amenaza a una mujer gnomo con lanzar sus pertenencias por la borda. Wrenn interviene inmediatamente, pero se ve superado por los reflejos de su contendor, que lo inmoviliza y, de forma burlesca, cumple sus amenazas a la pequeña criatura. Aprovechando la distracción, un bandido halfling toma una de las armas de Wrenn, una curiosa espada corta que lleva en su cinto, y corre esperando perderse en el interior del navío.

Una pequeña Tiefling Ranger ha pasado los últimos tres días oculta en una de las bodegas de cubierta. Se sobresalta con la entrada del halfling, que cierra violentamente la puerta y se dispone a revisar su botín. Se detiene en seco cuando escucha un susurro que le instruye claramente "Sal de aquí" en el momento que la puerta se vuelve a abrir de golpe. Al girarse, se encuentra cara a cara con el enorme Dragonborn bloqueando la salida. Frustrado por su desafortunada mañana, el Paladín hace retumbar la habitación con un gruñido que causa que el bandido pierda la conciencia, no sin antes desaguar en sus pantalones. Dejando que su curiosidad la haga olvidar su cautela, Harisa sale de su escondite y luego de observar a la criatura, le pide ayuda para liberar una rendija hacia una fuente de luz ubicada en uno de los pisos bajo cubierta.

Mientras un arrogante semiorco entra al comedor del barco haciendo alarde de un encuentro con otro de los pasajeros, una hechicera humana parece ignorar todo a su alrededor, absorta en la luz de las velas que iluminan su expresión marcada por la tristeza. Esaltazión se lamenta para sus adentros cuando un hombre completamente borracho se le aproxima, tomando su belleza como una invitación y su indiferencia como un insulto. A medida que el sujeto se exalta, la mujer decide conducirlo hacia un rincón, donde utiliza discretamente su poder para abandonarlo en paños menores y darse nuevamente a la tarea de ahogar sus penas.

De pie en medio del alboroto del comedor, un mago humano mira intensamente la mesa de Don John y su círculo de primera clase. Yardis arregla sus ropas antes de acercarse a la mesa, presentándose como un miembro de la alta alcurnia del reino de Trindefel. A pesar de no conocer tan prósperas tierras, Don John parece estar complacido con la naturaleza aduladora, aunque un tanto empalagosa del hombre, y casi por diversión le concede su tiempo.

A pesar de que Öz Lander, alias José Ricardo acaba de comenzar a trabajar en el Escarlata Errante, parece ser el tripulante preferido de todos los pasajeros. Su actitud carismática rápidamente le facilitó evitar toda sospecha al momento de infiltrarse en los aposentos del Conde Bismark y extraer una de las páginas de sus documentos personales. Con un uso casi instintivo de sus habilidades de sigilo, esconde el pergamino en su atuendo y vuelve al comedor para retomar su fachada. Es entonces cuando la fortuna le juega una mala pasada y el tiempo se detiene cuando el folio cae al suelo, captando la atención de Esaltazión y confirmando las sospechas de Yardis, quien lo vigilaba con el rabillo del ojo. Conviniendo en evitar oídos no deseados, los tres terminan compartiendo la estancia con el lamentable pretendiente de la hechicera.

La Reunión:
La conversación del trío es breve a causa del abordaje de la Capitana Wilma Tres Lenguas y su dotación de piratas, que en ese momento están reuniendo a cada alma en el barco al interior del comedor. La mujer amenaza con comenzar a matar pasajeros si no recibe información de un artefacto conocido como el Tantrus Omega, mientras sus hombres arrastran a unos inconscientes Wrenn y Harisa, también en calidad de rehenes. La tiefling hace un intento fallido por distraerla, que tiene como consecuencia la muerte de una mujer, la esposa del rival de Bismark, Don John. Yardis, intentando calmar la situación, responsabiliza a Bismark sin contar con que fue el Conde mismo quien contrató a Wilma Tres Lenguas para descubrir el paradero del artefacto, desatando una pelea. La party toma ventaja con la ayuda de algunos de los tripulantes, mientas Yardis se aprovecha del pánico para retroceder. Cuando la tripulación pirata se ve decimada, Tres Lenguas mata por su propia mano a su última aliada y se somete para ser capturada. Antes de hacer un último intento de escapar, entra en escena Abrazhador, un poderoso enano clérigo, y de un hachazo termina con ella.