Sesión 46-47: La batalla por Candlekeep

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Mientras Harisa, Esi y Wrenn pelean con Oz y Pascallini gigantes, el verdadero Oz junto con Yardis y co envian a Carmine el bartender bajo la custodia de Elminster.
Yrianna no puede creer que Carmine sabía sobre el cambio de planes y no se lo dijo, y, vengativa, le revela el plan de Cela a Yardis: En la plaza, cuando la luna llena se alze sobre Candlekeep, se llevará a cabo un conjuro que levantará el mar, arrasando con toda la ciudad. La plaza está plagada de ratas gigantes, magos transformados, además de 10 conjuradores a cargo del hechizo lunar y 4 magos de alto rango con la misión de protegerlos, todos ellos vigilados por el dragón rojo que sobrevuela la ciudad.
Con algo de tiempo antes de la media noche, la party decide ignorar al grupo de guerreros del norte encerrados en la plaza y se dirige a la academia para ayudar a los profesores y conseguir las suficientes fuerzas para adentrarse en la plaza.
La party y co. embosca a los magos traidores de la academia y recluta a un grupo de profesores que se unen a regañadientes. A la vuelta, Harisa percibe algo extraño en la ahora destruida torre de Oraldo. Wrenn investiga mientras el resto del grupo espia la plaza y arma un plan.
Oraldo aparece por un pequeño portal, malherido; pero trae a Etherling consigo. El viejo le confiesa a Wrenn que es su obra maestra y muere. El dragonborn, emocionado, logra tocar su flauta y capturar su alma en una filacteria, antes de volver con sus amigos.
El grupo tiene un plan: Usar al vocero que ha secuestrado el Sendorial para crear una distracción desmoralizante mientras un grupo se infiltra a la casona del artificer en busca de bombas para explotar la estructura sobre los conjuradores. Mientras tanto, desde lejos los magos de Candlekeep lanzan un contundente ataque sorpresa a uno de los 4 magos de alto rango y se concentran en bajarlos rápidamente, antes de enfocarse en los conjuradores. Las fuerzas melee entran por un costado de la plaza y abren espacio para que los guerreros encerrados en el sendorial puedan unirse a la batalla. Todo sale mayoritariamente como se planea. El vocero proclama confusos mensajes en favor del Norte que se transmiten a través de portales a todo el Sur. Oz y Harisa encuentran al artificer quien se une al plan y les ayuda a crear las bombas. Esi guía a los profesores con sus ataques mágicos de largo rango y el mago contrahechicero cae velozmente, pero Yardis captura su alma en su jaula de plata. Los ataques se vuelcan contra otro de los 3 magos restantes quien también cae. Pero los 2 magos que quedan están más preparados y crean globos de invulnerabilidad y teleportaciones que mantienen a los conjuradores fuera de riesgo. Finalmente Wrenn rompe las defensas de los magos y Esi lanza un poder multicolor multisabor a los conjuradores. La casona que se derrumba le sigue, destruyendo a gran parte de los conjuradores. Pero el conjuro aun sigue en pie. En la mitad de todo el caos Yrianna llama a Yardis para que le consiga acceso a Carmine. Harisa persigue a los conjuradores en forma de Quetzacoalt mientras el mago teleportador los mueve fuera de alcance. Finalmente, Oz lanza un ataque mágico que acaba con el último conjurador y el mar se detiene. Cabeza hueca vuela blandiendo la bandera de Candlekeep y la gente del sur se desconecta en su mayoría con desinterés, mientras que un quinto parece molesto con el resultado de la batalla.


Sólo queda el dragón y algunos magos, por lo que las fuerzas de Cela están cerca de rendirse, cuando el grupo Axio Caritas aparece en una esquina, sosteniendo a Zar como rehen. Oz reconoce en el dragonborn guardaespaldas, la psicótica mirada de su ex-amigo Cela.