00. El camino recorrido
General Summary
2525-2527
Tras la inesperada reaparición de Archaón tres años tras su caída ante las puertas de Middenheim, los fuegos de la guerra se recrudecen en el norte. Las hordas del caos arrasan hacia el Sur de nuevo, como un Tsunami, aclamando al señor del fin de los tiempos.
La historia de nuestros héroes, los que se conocerían, más tarde, como los Portadores de Talión, por su incansable temeridad y audacia en contra de aquellos que sirven a los poderes ruinosos, comienza en el norte, como voluntarios en la defensa de los territorios de Kislev. Allí fueron testigos de como el heraldo del fin de los tiempos arrasaba la ciudad de Kislev con un poderoso artefacto conocido con el ojo del Caos, capaz de abrir una puerta a la disformidad y transformar a hombre, elfo, enano o bestia en catalizador para los sirvientes de los dioses oscuros.
Los portadores de Talión se internaron en territorio enemigo, siguiendo el rastro de leyendas sobre el Ojo del Caos, averiguando que la única forma de destruir el artefacto de manera segura era con el martillo del sacerdote de Vault Denvedha, un exiliado que dedicó su vida a estudiar y tratard e destruir dicho artefacto. por desgracia su pista se perdía en un ancestral Karak perdido hace milenios en las montañas del norte, con la única pista de un grupo de cazadores de brujas que llegaon al mismo lugar decadas antes.
Con la ayuda de Ganfdolf Frey y su organización secreta al servicio del Emperador, pasaron algo más de dos años siguiendo la pista al elusivo artefacto, mientras luchaban contra la corrupción que parecía extenderse sin restricciones por todo el imperio, lloraban la perdida de amigos y compañeros, y la guerra contra el Caos se recrudecía en el norte del imperio.Al final, consiguieron una pista sólida, el último lugar visitado por el cazador de brujas que dirigió la expedición en el Karak del norte.
Los Portadores de Talión se encaminaron a la ciudad maldita de Mordheim, donde, por desgracia, sufrirían un golpe devastador.
En una batalla desesperada contra un Devorador de Almas invocado por una reciente lluvia de piedrabruja, la hechicera brillante, Aurora, que acompañaba a los portadores desde la guerra en Kislev, perdió el control y se convirtió en un conducto a los reinos del caos permitiendo la entrada al mundo de Malal, con el cual había firmado, inconscientemente y en secreto, un pacto a cambio de la inmortalidad. Por suerte, el aprendiz de herrero rúnico Randal Rocanegra, con el conocimiento rúnico perdido obtenido en el Karak perdido, logro sellar la entrada de Malal sacrificándose en el proceso, convirtiéndose a si mismo y a Aurora en el procesod e transformación en una roca de un mineral desconocido que aún se alza en las calles de la ciudad maldita, pues ninguna fuerza es capaz de moverlas, ningun arma capaz de dañarla y ninguna criatura del caos capaz de acercarse.
Tras perder a la mayor parte de su grupo, y la ciudad de Mordheim convertida en un hervidero de pesadillas por las energías desatadas en el evento, los portadores de Talión se dispersaron en una desesperada búsqueda para liberar a Randal y el conocimiento que le había permitido sellar la entrada de tal poderosa entidad del Caos.
Más de un año ha transcurrido y, ahora, la nota de un inesperado aliado, otorgada a Fennec , uno de los miembros originales de los Portadores de Talión, ha arrojado la primera pista, el primer fragmento de información tangible.
El mago de sombras, envía mensajes a sus aliados.
Ha llegado el momento de que los Portadores de Talión se reúnan de nuevo.
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