Falantia 03: Humo y espejos...
General Summary
El El Cithara toma altura y se aleja de la ciudad, Jurian Kleek lo nota y va a hablar con el capitán. El enano Thrag está con cara de preocupado y al devolver la mirada al clérigo, este se le acerca. "No se cuanto van a tardar tus amigos pero los refugiados corren peligro estando en este llamativo barco, debo alejarme de la costa y refugiarme entre las nubes." El plumífero realiza una reverencia y agradece la ayuda pero aún con un poco de miedo de los horrores presenciados, deja caerse hacia atrás de la borda, y con un giro sus alas embolsan el aire de la noche. Planeando bajo la luna Jurian desciende por la claraboya que lo había dejado escapar pero en vez de una solemne sala del magistrado, se encontró con la sombra y la noche. La sala vacía dibujaba con sus columnas figuras grotescas y con suerte se veía una puerta de roble cerrada por completo. Con el atizador de una chimenea no encendida por generaciones, trató de abrira la gran puerta y consiguiendolo se encontró que estaba bloqueada del otro lado. Su único recurso para huir de esa habitación al resto del castillo era volar o utilizar las ventilaciones que habían en el suelo temiendo que de allí emerge otra de sus grotescas cabezas animadas.
Las extremidades de Jurian se doblan y se retuercen para poder entrar en el túnel de ventilación que desemboca en la rejilla cercana al piso a los costados de la gran puerta. En un tedioso descenso por el túnel el plumífero se convierte en una maraña de patas y plumas mientras se las arregla para descender por la pared rocosa. Al salir y desempolvarse puede observar dificultosamente un pasillo cavernoso que corre de lado a lado. En medio del mismo se puede ver una criatura que se empuja a sí misma contra la pared. La piel grisácea y viscosa es inconfundible y sorprende al clérigo. Al parecer la criatura posee varias extremidades que tiene prolongadas en diferentes huecos que fueron hechos en la pared. Solo una cola o tentáculo está extendido sobre el suelo y suele retorcerse de tanto en tanto. Apelando al factor sorpresa, Jurian toma una de las bolitas de cristal que fue repartida por Dendri de su regalo de Reina de Shawson Piers.
El color de la bolita de cristal era azul e ignorando los efectos que podría ocasionar la arrojó sin mucha reflexión a los pies de la criatura que se retorcía contra la pared. Del impacto comenzó a surgir una nube densa y oscura y otras más en tonos azulados y grises, el humo espeso comenzó a subir por las paredes y de su núcleo rayos comenzaron a impactar en las paredes de roca de la cueva donde estaban, provocando fracturas en la piedra y desmoronamientos. Jurian siente que debe escapar de allí o enfrentarse a la bestia por lo que decide abrir una puerta que estaba en el extremo opuesto de la caverna alargada. La puerta estaba abierta y llevaba a una escalera ascendente.
Los aventureros quedan atónitos mientras la realidad se despliega ante sus ojos. La pradera se desvanece por las nubes tormentosas que salen del cuerpo de Devlin, revelando los muros desgastados y las sombras ominosas del castillo del Alto conde de Zátiva. La ilusión se rompe, dejando al descubierto la verdadera naturaleza de la bestia que habita en el subsuelo del castillo. La confusión y el desconcierto son palpables en el aire, mientras los aventureros y los presentes se recuperan del impacto de la revelación. La ilusión del casamiento ha sido desvanecida, pero la conexión que manifestaron en ese momento sigue ardiendo en los corazones de todos.
Al volver a presenciar el pasillo, ahora con el piso destruido que había bloqueado la apertura de la puerta para Jurian, Dendri, Leban, Gastón y Devlin despiertan a la realidad. Augusto, Muth y Chromium están inconscientes producto de la nube tóxica o de la caída de rocas. Luego de recoger a los heridos en el fondo del pasillo por donde entraron al castillo se abre una puerta y la luz nocturna deja ver una silueta de ave, una que esperaron ver por un tiempo ya.
Dendri confundido apenas se puede mover. Todos menos el plumífero tiene 6 meses de recuerdos como si los hubiese vivido y esto enoja y desorienta. Mientras avanzan escaleras arriba por la torre las preguntas no tienen respuesta. Por Qué Dendri accedería a casarse? Porque estos recuerdos en su interacción con Augusto, la familia de Erin? Donde está Erin? Gastón haciendo caso omiso a sus propios planteos solo quiere sacar a todos de aquél maldito lugar. Llegan al ático que sirvió de aposentos del felino erudito y sin prestar mucha atención a las pilas de afiches alusivos a tiempos pasados, comienzan su descenso por la ventana circular de la habitación.
La magia permite a todos flotar desde la torre hacia las afueras de la mansión, terminando en un Devlin que usando la cola de sus compañeros desmayados, improvisa un trineo subido en los lomos de Muth y Chromium. El descenso les mostró una ciudad en la que las calles estaban desiertas pero las patrullas de soldados se habían intensificado de lo habitual conocido en el último mes. Los guardias equipados con grandes espadones y dagas circulaban los callejones en equipos de tres. No había chance de tomar los caminos principales por lo que ayudando a los desvalidos cojearon su camino para el lado de la taberna.
Pasando por un estrecho callejón que daba a un mercado, el tiefling pateó unos baldes que se acumulaban bajo un surtidor de agua haciendo un escándalo que retumbó en toda la callejuela. De pronto de la sombra del otro extremo del mercado aparecen tres figuras felinas en sus armaduras de chapa oscura.
Los soldados se abalanzan y Gastón los enfrenta recibiendo graves daños pero evitando que sus compañeros sean afectados inicialmente. Devlin y Leban colocan a los demás a un costado para evitar que corran riesgos mientras se despliegan para atacar estratégicamente. Dendri con unos pases y sus ojos encendidos envía un hechizo maldito que provoca que una mano espectral estruje las latas de uno de los guardias que había encarado al arquero explorador. Gastón corre a resguardarse por las heridas que había recibido ayudado por Leban que abrió unos compartimientos en su armadura que provocó que un enjambre de arañas mecánicas tejieran en los pies de dos de los tres guardias, unas pegajosas cuerdas de telaraña y provocaron confusión entre ellos.
Sin poder hacer nada, dos de los guardias observaron como Jurian pasó volando y se colocó en el centro de la batalla y con una oración abrió sus alas para que una ola de aire cálido y brillo blanco resplandeciera entre sus compañeros. Alentado por este nuevo aire y restaurado en su vitalidad, Gastón retorna al lugar posicionándose y aprovechando lo inmovilizado de su oponente mientras que el otro recibe flechazos de Devlin y un tercero que fue al encuentro de Leban. El artificiero expulsando ácido repelió el ataque del guardia y enviando a unos insectos voladores mecánicos que agarraron una rueda de carreta, impactaron en el casco de uno de los guardias inmovilizados destruyendo su casco y lo que había en su interior. El guardia con ácido en su casco y armadura corrosionandose no pudo mas que sacarse el casco para encontrar a la cara de un enjendro demoníaco que terminó incinerando su pelambre. La pelea concluyó cuando dos flechas penetraron las armaduras del guardia que pretendía atacar a Gastón nuevamente, siendo Devlin el que maniobró para dispararlas.
El sonido de las chapas contra el suelo de adoquines del callejón de Zátiva le siguió un silencio abrumador, ni los sonidos ahogados de conversaciones en las casas aledañas se escuchaban. Los aventureros siguieron su furtivo camino. Al llegar a donde recuerdan que estaba la taberna, la cual habían visitado en sus sueños por meses, se extrañaron al encontrar su puerta tapiada. Tal vez los guardias la habían bloqueado en su ausencia, pero lo que encontraron adentro los confundió aún más. Las tablas rotas del piso superior aun daban paso a la luz de la luna. Como un altar de tiempos inmemoriales, la barra de la taberna parecía un depósito de tierra y olvido. Las mesas caídas y acumuladas a un costado de la habitación principal y las telarañas que el tiempo ha dejado crecer en ese lugar parecían no tener relación con sus recuerdos del refugio para las razas que vienen del viejo continente de Tursh .
Irradiante el sol se alza majestuoso en el horizonte, pintando el cielo con tonos cálidos y dorados. La pradera donde se encuentra el altar brilla con un verde exuberante salpicado de flores silvestres de colores vibrantes. Una ligera brisa acaricia suavemente los pétalos de las flores, llevando consigo un aroma dulce y fresco.
La novia Erin, radiante en su vestido, camina con gracia por el pasillo improvisado, su vestido blanco flotando alrededor de ella con cada paso. El vestido, adornado con encajes y bordados delicados, resalta su belleza natural, mientras que un velo sutil cubre su rostro, agregando un aire de misterio y anticipación.
Un ceremonioso Thrag, vestido con una túnica sacerdotal de tonos suaves, se encuentra junto al altar. Sus ojos brillan con una mezcla de solemnidad y alegría mientras recita palabras de bendición y unión. Su voz, serena y profunda, llena el aire y envuelve a los presentes en una atmósfera de calma y amor.
Sollozando Augusto, el padre de la novia, camina lentamente hacia el altar. Sus ojos están llenos de lágrimas de felicidad y orgullo mientras observa a su amada hija dar el paso hacia una nueva vida. Cada paso que da es un testimonio del amor y apoyo incondicional que ha brindado a lo largo de los años.
Incluso los amigos y compañeros aventureros de Dendri se encuentran emocionados y conmovidos. Gaston, Leban, Chromium y Muth observan con alegría y expectación, conscientes de la importancia de este momento para Dendri y el impacto que tiene en su vida. Sus rostros reflejan una mezcla de emoción, alegría y gratitud por haber sido parte de este viaje y de la aceptación de Dendri en la familia felina de Augusto.
Ominosos, los rayos del sol matutino iluminan el acantilado de Zátiva , creando un espectáculo de luces y sombras en el paisaje que se extiende más allá del altar. El sonido suave de las olas rompiendo contra las rocas se escucha a lo lejos, añadiendo una nota de serenidad y eternidad al momento.
Ni Dendri, ni Erin, se apartan su mirada entre sí, diciendo fervorosos sus votos de entrega uno al otro. Sus palabras están llenas de amor, promesas y compromiso, resonando en el corazón de cada persona presente. Un suspiro colectivo de emoción y admiración se extiende por la pradera mientras todos presencian este momento de profunda conexión.
Thrag, con voz solemne, dice: "Si alguien se opone, hable ahora o calle para siempre". Por un breve instante, un silencio tenso envuelve a los presentes, mientras todos esperan con anticipación. Pero entonces, Gaston, fiel amigo de Dendri, interrumpe inesperadamente.
Gaston se levanta de su asiento, con una mirada de determinación en sus ojos. Alega que siempre ha sentido algo especial por Dendri y que no puede permitir que se case con otra persona. Sus palabras causan un revuelo de sorpresa y confusión entre los presentes.
Sin embargo, antes de que las emociones se asienten, Devlin , el aventurero de temperamento impetuoso, irrumpe en la escena de manera impactante. Un torbellino de rayos y viento lo envuelve, convirtiéndolo en una figura imponente y poderosa. La ilusión del casamiento empieza a desmoronarse a su paso, revelando la verdad detrás de esta hermosa pero irreal escena.
La novia Erin, radiante en su vestido, camina con gracia por el pasillo improvisado, su vestido blanco flotando alrededor de ella con cada paso. El vestido, adornado con encajes y bordados delicados, resalta su belleza natural, mientras que un velo sutil cubre su rostro, agregando un aire de misterio y anticipación.
Un ceremonioso Thrag, vestido con una túnica sacerdotal de tonos suaves, se encuentra junto al altar. Sus ojos brillan con una mezcla de solemnidad y alegría mientras recita palabras de bendición y unión. Su voz, serena y profunda, llena el aire y envuelve a los presentes en una atmósfera de calma y amor.
Sollozando Augusto, el padre de la novia, camina lentamente hacia el altar. Sus ojos están llenos de lágrimas de felicidad y orgullo mientras observa a su amada hija dar el paso hacia una nueva vida. Cada paso que da es un testimonio del amor y apoyo incondicional que ha brindado a lo largo de los años.
Incluso los amigos y compañeros aventureros de Dendri se encuentran emocionados y conmovidos. Gaston, Leban, Chromium y Muth observan con alegría y expectación, conscientes de la importancia de este momento para Dendri y el impacto que tiene en su vida. Sus rostros reflejan una mezcla de emoción, alegría y gratitud por haber sido parte de este viaje y de la aceptación de Dendri en la familia felina de Augusto.
Ominosos, los rayos del sol matutino iluminan el acantilado de Zátiva , creando un espectáculo de luces y sombras en el paisaje que se extiende más allá del altar. El sonido suave de las olas rompiendo contra las rocas se escucha a lo lejos, añadiendo una nota de serenidad y eternidad al momento.
Ni Dendri, ni Erin, se apartan su mirada entre sí, diciendo fervorosos sus votos de entrega uno al otro. Sus palabras están llenas de amor, promesas y compromiso, resonando en el corazón de cada persona presente. Un suspiro colectivo de emoción y admiración se extiende por la pradera mientras todos presencian este momento de profunda conexión.
Thrag, con voz solemne, dice: "Si alguien se opone, hable ahora o calle para siempre". Por un breve instante, un silencio tenso envuelve a los presentes, mientras todos esperan con anticipación. Pero entonces, Gaston, fiel amigo de Dendri, interrumpe inesperadamente.
Gaston se levanta de su asiento, con una mirada de determinación en sus ojos. Alega que siempre ha sentido algo especial por Dendri y que no puede permitir que se case con otra persona. Sus palabras causan un revuelo de sorpresa y confusión entre los presentes.
Sin embargo, antes de que las emociones se asienten, Devlin , el aventurero de temperamento impetuoso, irrumpe en la escena de manera impactante. Un torbellino de rayos y viento lo envuelve, convirtiéndolo en una figura imponente y poderosa. La ilusión del casamiento empieza a desmoronarse a su paso, revelando la verdad detrás de esta hermosa pero irreal escena.
Las extremidades de Jurian se doblan y se retuercen para poder entrar en el túnel de ventilación que desemboca en la rejilla cercana al piso a los costados de la gran puerta. En un tedioso descenso por el túnel el plumífero se convierte en una maraña de patas y plumas mientras se las arregla para descender por la pared rocosa. Al salir y desempolvarse puede observar dificultosamente un pasillo cavernoso que corre de lado a lado. En medio del mismo se puede ver una criatura que se empuja a sí misma contra la pared. La piel grisácea y viscosa es inconfundible y sorprende al clérigo. Al parecer la criatura posee varias extremidades que tiene prolongadas en diferentes huecos que fueron hechos en la pared. Solo una cola o tentáculo está extendido sobre el suelo y suele retorcerse de tanto en tanto. Apelando al factor sorpresa, Jurian toma una de las bolitas de cristal que fue repartida por Dendri de su regalo de Reina de Shawson Piers.
El color de la bolita de cristal era azul e ignorando los efectos que podría ocasionar la arrojó sin mucha reflexión a los pies de la criatura que se retorcía contra la pared. Del impacto comenzó a surgir una nube densa y oscura y otras más en tonos azulados y grises, el humo espeso comenzó a subir por las paredes y de su núcleo rayos comenzaron a impactar en las paredes de roca de la cueva donde estaban, provocando fracturas en la piedra y desmoronamientos. Jurian siente que debe escapar de allí o enfrentarse a la bestia por lo que decide abrir una puerta que estaba en el extremo opuesto de la caverna alargada. La puerta estaba abierta y llevaba a una escalera ascendente.
Los aventureros quedan atónitos mientras la realidad se despliega ante sus ojos. La pradera se desvanece por las nubes tormentosas que salen del cuerpo de Devlin, revelando los muros desgastados y las sombras ominosas del castillo del Alto conde de Zátiva. La ilusión se rompe, dejando al descubierto la verdadera naturaleza de la bestia que habita en el subsuelo del castillo. La confusión y el desconcierto son palpables en el aire, mientras los aventureros y los presentes se recuperan del impacto de la revelación. La ilusión del casamiento ha sido desvanecida, pero la conexión que manifestaron en ese momento sigue ardiendo en los corazones de todos.
Al volver a presenciar el pasillo, ahora con el piso destruido que había bloqueado la apertura de la puerta para Jurian, Dendri, Leban, Gastón y Devlin despiertan a la realidad. Augusto, Muth y Chromium están inconscientes producto de la nube tóxica o de la caída de rocas. Luego de recoger a los heridos en el fondo del pasillo por donde entraron al castillo se abre una puerta y la luz nocturna deja ver una silueta de ave, una que esperaron ver por un tiempo ya.
Dendri confundido apenas se puede mover. Todos menos el plumífero tiene 6 meses de recuerdos como si los hubiese vivido y esto enoja y desorienta. Mientras avanzan escaleras arriba por la torre las preguntas no tienen respuesta. Por Qué Dendri accedería a casarse? Porque estos recuerdos en su interacción con Augusto, la familia de Erin? Donde está Erin? Gastón haciendo caso omiso a sus propios planteos solo quiere sacar a todos de aquél maldito lugar. Llegan al ático que sirvió de aposentos del felino erudito y sin prestar mucha atención a las pilas de afiches alusivos a tiempos pasados, comienzan su descenso por la ventana circular de la habitación.
La magia permite a todos flotar desde la torre hacia las afueras de la mansión, terminando en un Devlin que usando la cola de sus compañeros desmayados, improvisa un trineo subido en los lomos de Muth y Chromium. El descenso les mostró una ciudad en la que las calles estaban desiertas pero las patrullas de soldados se habían intensificado de lo habitual conocido en el último mes. Los guardias equipados con grandes espadones y dagas circulaban los callejones en equipos de tres. No había chance de tomar los caminos principales por lo que ayudando a los desvalidos cojearon su camino para el lado de la taberna.
Pasando por un estrecho callejón que daba a un mercado, el tiefling pateó unos baldes que se acumulaban bajo un surtidor de agua haciendo un escándalo que retumbó en toda la callejuela. De pronto de la sombra del otro extremo del mercado aparecen tres figuras felinas en sus armaduras de chapa oscura.
Los soldados se abalanzan y Gastón los enfrenta recibiendo graves daños pero evitando que sus compañeros sean afectados inicialmente. Devlin y Leban colocan a los demás a un costado para evitar que corran riesgos mientras se despliegan para atacar estratégicamente. Dendri con unos pases y sus ojos encendidos envía un hechizo maldito que provoca que una mano espectral estruje las latas de uno de los guardias que había encarado al arquero explorador. Gastón corre a resguardarse por las heridas que había recibido ayudado por Leban que abrió unos compartimientos en su armadura que provocó que un enjambre de arañas mecánicas tejieran en los pies de dos de los tres guardias, unas pegajosas cuerdas de telaraña y provocaron confusión entre ellos.
Sin poder hacer nada, dos de los guardias observaron como Jurian pasó volando y se colocó en el centro de la batalla y con una oración abrió sus alas para que una ola de aire cálido y brillo blanco resplandeciera entre sus compañeros. Alentado por este nuevo aire y restaurado en su vitalidad, Gastón retorna al lugar posicionándose y aprovechando lo inmovilizado de su oponente mientras que el otro recibe flechazos de Devlin y un tercero que fue al encuentro de Leban. El artificiero expulsando ácido repelió el ataque del guardia y enviando a unos insectos voladores mecánicos que agarraron una rueda de carreta, impactaron en el casco de uno de los guardias inmovilizados destruyendo su casco y lo que había en su interior. El guardia con ácido en su casco y armadura corrosionandose no pudo mas que sacarse el casco para encontrar a la cara de un enjendro demoníaco que terminó incinerando su pelambre. La pelea concluyó cuando dos flechas penetraron las armaduras del guardia que pretendía atacar a Gastón nuevamente, siendo Devlin el que maniobró para dispararlas.
El sonido de las chapas contra el suelo de adoquines del callejón de Zátiva le siguió un silencio abrumador, ni los sonidos ahogados de conversaciones en las casas aledañas se escuchaban. Los aventureros siguieron su furtivo camino. Al llegar a donde recuerdan que estaba la taberna, la cual habían visitado en sus sueños por meses, se extrañaron al encontrar su puerta tapiada. Tal vez los guardias la habían bloqueado en su ausencia, pero lo que encontraron adentro los confundió aún más. Las tablas rotas del piso superior aun daban paso a la luz de la luna. Como un altar de tiempos inmemoriales, la barra de la taberna parecía un depósito de tierra y olvido. Las mesas caídas y acumuladas a un costado de la habitación principal y las telarañas que el tiempo ha dejado crecer en ese lugar parecían no tener relación con sus recuerdos del refugio para las razas que vienen del viejo continente de Tursh .
Fecha del informe
14 Nov 2024
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