Buenas noches damas y caballeros.
Siguiendo el orden cronológico de las aventuras de nuestros héroes, hoy os contaré lo sucedido tras el valeroso rescate y sabotaje.
Reconozco que esta historia no posee tan rigurosos datos, no por falta de investigación, pues soy un hombre dedicado, sino porque el siguiente sitio que nuestros héroes visitaron…
Estaba perdido en las montañas al norte de Kislev.
Por detrás del avance de las líneas enemigas.
¿Qué fueron a buscar allí?
Nadie lo sabe con certeza.
Pero sin duda, era un objeto de gran poder, y siendo en las montañas, está clarísimo que en un Karak perdido hace miles de años. Cuando sus grandes herreros rúnicos estaban en el apogeo de su arte y las maravillas que creaban eran capaces de alterar un campo de batalla.
Ah, pero ¿quién averiguó dónde fueron nuestros héroes?
Pues no son nada más ni nada menos que veintisiete mujeres que fueron rescatadas por nuestros ocho guerreros de una avanzadilla de hombres bestias.
Y no fueron las únicas, pues se dieron la vuelta para llevarlas a la capital kislevita y aseguraron su bienestar y partieron a toda prisa hacia las montañas.
Nunca se cansan de luchar contra el caos y de ayudar a todos aquellos que les necesitamos.
Lo que pasó allí tan lejos, al norte, y qué encontraron es lo que no se sabe con certeza.
Solo quedan conjeturas, pero os diré lo que SÍ sé con certeza.
Nadie pudo volver a esas montañas desde la caída de Kislev, así que no pude investigar el terreno. Pero lo que sí que pude hacer fue hablar no con uno, ni dos, sino tres cazadores que tenían su terreno en las cercanías.
Todos contaban la misma historia, más o menos, claro está. Pero coincidían en las fechas.
Llevaban unos meses teniendo problemas con los pieles verdes, se volvieron más numerosos, más arrojados y agresivos. Quemaban y destruían todo a su paso, daba igual que fueran animales, pequeñas aldeas o meros árboles.
Nada se podía salvar de su sed de destrucción y violencia.
Pues al poco de que nuestro famoso grupo llegara a la zona, los cazadores fueron capaces de oír grandes explosiones, humaredas que enegrecían el cielo y el sonido inconfundible de unos portones cerrándose a cal y canto.
Lo que todos aseguraban fue que una vez que se hizo el silencio y volvió la calma a las montañas…
Prácticamente no había presencia de pieles verdes.
Lo cual nos hace pensar que fueron capaces, solamente ellos ocho, de recuperar un Karak y sus misterios del Waaaaagh que se empezaba a formar en esas montañas.
Oh, pero esta aventura no termina aquí, no señoras y señores.
Pues demostrando, una vez más, ser dignos del título “Portadores de Talión” aprovecharon que estaban detrás de las líneas enemigas para destruir puntos clave en el ejército del Caos.
¿Os acordáis de mi primo? Pues me presentó a uno de los exploradores que se encargaban de recopilar información de las fuerzas enemigas para preparar las defensas. Ese explorador ahora mismo trabaja con Makarov, JA, ese hombre se rodea de leyendas.
Pues este explorador jura por la Zharina que vio a nuestro heroico grupo acercarse a uno de los campamentos de los enanos del Caos. Sí, los que se encargan de la artillería. Era de esperar, pues si hay algo que más odian los enanos que los pieles verdes son a sus oscuros primos.
Al poco tiempo de ver como se acercaban pudo oír el sonido más espantoso de su vida, os prometo que mientras me lo contaba se le puso la piel de gallina sólo de recordarlo… y ya había pasado más de un año cuando le conocí.
Pues este terrorífico ruido eran los cañones del caos volviéndose locos y atacando a su propio campamento.
Claro que atacaron solos. Son las fuerzas del Caos, si no has visto nunca un cañón de esos tienes suerte y si nunca llegas a verlos siéntete afortunado. Estos extraños cañones son creados por los más retorcidos de los herreros del Caos. Fusionan demonios con la artillería para volverla más letal y aterradora…
Hasta que un grupo de valientes héroes los desatan en mitad de las fuerzas enemigas y provocan que se destruyan mutuamente.
Jajajajaja.
¡BRINDEMOS POR SU INJENIO Y ARROJO!
NECESITO UNA CERVEZA PARA BRINDAR…..¡¡GRACIAS!!
Pues no contentos con ello, al llegar a un puesto defensivo que se veía asaltado por los hombres bestia consiguieron romper el asedio dando tiempo a nuestros guerreros de retirarse a un sitio seguro.
En su avance hacia la capital no dejaron de asaltar al Caos y de ayudar a nuestros valientes guerreros.
Tras desbaratar incontables planes del Caos por fin llegaron a la ciudad de la Zharina.
Pero no todo sale como en los cuentos…
Uno de los enanos no volvió jamás de esta aventura…
¿Cayó recuperando el conocimiento de sus ancestros? ¿Tal vez fue luchando contra sus despiadados y corruptos primos? No lo sabemos, pero… ¿qué creéis vosotros?
Una vez que consiguieron llegar y tomar el aliento, ¿Qué sería lo siguiente que harían? ¿Huirían como tantos estaban haciendo en ese momento? ¿O se quedarían a defender la capital del inevitable ataque?
Lo siguiente que hicieron…
Solo sirvió para aumentar su leyenda.