Un reencuentro bélico e inesperado

General Summary

Tras la nostálgica despedida de Rakan y la importante conversación con Favalas, en la que lograron obtener la información acerca de las sombrías criaturas que acompañaban a la visión y que al parecer cegaron la vida de cuantiosos Fessha, los aventureros se reencontraron nuevamente con Zak’anu, quien les agradeció nuevamente por perdonarle la vida y comenzaron una pequeña entrevista, entre numerosas preguntas, les comentó datos interesantes sobre el resto de las razas, les aclaró que no podían cambiar su destino, el cual era sellado por el tatuaje ritual hecho por Favalas, hizo especial hincapié en la importancia del bosque para los subridos y culminó con una terrorífica afirmación al preguntarle sobre La gran visión: aseguró que era una profecía de un gran guardián que viene en camino para unirlos a todos, con lo que reveló inconscientemente el alineamiento maligno de todas aquellas criaturas.

Después, los aventureros recorrieron cortamente el bosque al lado de Zak’anu y hubo un momento especial que hizo desdichado a Zeth y fue cuando vio a unos jóvenes súbridos haciendo tonterías y riendo, tal como lo había hecho él en otras épocas, la culpa lo carcomía luego de haber segado la vida del Avyimali que acompañaba a Zak’anu, tanto tiempo escuchando que eran el enemigo y en realidad veía que eran iguales. Pasado este mal trago para Zeth, los aventureros retomaron su objetivo, por lo que le comentaron a Zak’anu que Favalas les dijo que las sombras del Señor de la Sangre se vieron al suroeste hace 3 o 4 meses, por lo que discutieron largo y tendido acerca de qué era lo correcto: volver a la maldita e inhóspita Vafenail, ir al puerto que se ubicaba a varios luxantes de allí para partir a otro lugar o dirigirse al suroeste en búsqueda de más pistas de aquellos profanadores de templos, con la notoria ausencia del queridísimo Rugen, quien al parecer se encontraba absorto bajo los fuertes efectos de sus “plantas sagradas”, sin su participación, se decidieron por el suroeste.

Cansados por la batalla, se tomaron un merecido descanso, al levantarse de sus lechos, se vieron rodeados por numerosas serpientes posadas en los árboles y fueron testigos de un misterioso ritual que parecía celebrar el día final de quamón, mientras el cielo se tornaba rojizo, los reptiles parecían enloquecer mientras movían sus cabezas, entonaban cánticos, se dejaban caer de las ramas de las que se sostenían sin temor a morir en las alturas, lo que las hacía vibrar y creaban así un sonido cada vez más estridente, esta espiral de locura parecía no tener fin, sin embargo, al oscurecerse el cielo por un instante para volver a su color carmesí, concluyendo esta singular escena. En medio del frenesí, los aventureros aprovecharon para pedir el favor de Favalas para dirigirse al suroeste e investigar a las criaturas que hicieron desaparecer a los Fessha del lugar, la Señora de Avzazilo en un principio les dijo que si iban con Zak’anu nada les pasaría, pero Flek aún desconfiaba y le pidió una pluma del cuervo que la acompañaba y tras acceder el ave a esto, tomó la ofrenda y la colocó en su sombrero, creando una clara señal ante los demás de que eran protegidos de ella.

Tras un viaje que les tomó 3 largos ciclos, el ambiente sufrió un estrepitoso descenso de temperatura, Zak’anu se extrañó al no ver a ningún Fessha y partió en búsqueda de un Avyimali que le pudiera explicar qué estaba pasando, la serpiente de Zeth se comenzó a comportar extraño: su dueño notó que la mitad de su cuerpo estaba fría y la otra caliente, al preguntarle qué le pasaba, la coral alcanzó a decir que tenía sed y la niebla era abundante, mientras Nobu, el gato que acompaña a Halion, buscaba desesperadamente calor entre su capa.

Flek escuchó 2 gemidos de dolor que venían desde el oeste mientras Abeloth logró captar chasquidos secos parecidos a rocas desde el noroeste, transcurridos unos minutos Zak’anu regresó y les informó que sólo pudo entablar una corta conversación con un escamoso, el cual bajo su imposibilidad de convertirse y con palabras escuetas, le confirmó que los Fessha habían desaparecido, por lo que discutieron un momento y decidieron dirigirse al noroeste, en donde Zak’anu detectó inmediatamente una anormalidad en el bosque: un pedazo de roca que era de un color anormal, decidieron acercarse y en ese preciso instante, fueron presas del ataque de 6 seres espectrales voladores, las criaturas se ensañaron con Abeloth y Rugen, al parecer, por sus poderes mágicos, logrando arrebatarles la conexión con sus dioses para espanto de los dos aventureros, especialmente Abeloth se mostraba petrificado ante la pérdida y la visión fugaz de 6 criaturas más sobrevolando el campo de batalla, en la reñida e intensa lucha Zeth quedó sumamente mal herido y Halion cayó indefenso ante los golpes certeros del enemigo, al parecer todos iban a presenciar su muerte a manos de estas criaturas que al principio se les antojaron fáciles de derrotar, pero gracias a la rapidez de Flek que transportó su cuerpo al lado de Abeloth, lograron salvarle de una muerte segura y tras un esfuerzo que nunca habían hecho, se alzaron con la victoria.

Culminada la súbita batalla que casi le cuesta la vida a Halion, Zeth dirigió su atención hacía su indispuesta compañera, encontrando que esta había expirado sin lograr decir adiós.

Fecha Eiláar
Pentamón 4 del 3 CH, Época novena
Campaign
El Olvido Creador
Protagonists
Fecha del informe
21 Nov 2021
Localización principal
Localización secundaria

Comentarios

Please Login in order to comment!