Laminium
LAMINIUM se fundó como consecuencia de la condena pronunciada por el rey de Asturias, Ramiro I, a todos los a todos los hechiceros de su reino. Tras la muerte de Tancoystl de Diedne, los magi Ex Miscellanea que vivían en Duresca se marcharon y fundaron su propia alianza entre las brumas del humedal de una regio que albergaba las antiquísimas ruinas de una ciudad perdida. Aunque los magi se establecieron en el tercer cuarto del siglo IX, no acudieron a ningún Tribunal hasta el 1012, momento en el que se constituyeron.
Estructura
Laminium siempre ha sido una gerontocracia, por lo que los miembros más ancianos son los que gobiernan la alianza. El consejo de ancianos se reúne cada equinoccio y solsticio en la explanada de la isla central, en el bosque de menhires, para discutir los asuntos de la alianza.
Los concilios se inician cuando uno de los ancianos enciende un fuego en la isla y duran todo un día y toda una noche, concluyendo con la inhalación del humo que desprenden ciertas raíces del lugar al ser quemadas. Tras esto se comunican las decisiones tomadas a los jóvenes, que no tienen capacidad de réplica: la resolución de los ancianos es inapelable. Sin embargo, el consejo de ancianos quedó ocupado por magi dementes tras la catástrofe, por lo que la alianza está gobernada por sus desvaríos.
Los concilios se inician cuando uno de los ancianos enciende un fuego en la isla y duran todo un día y toda una noche, concluyendo con la inhalación del humo que desprenden ciertas raíces del lugar al ser quemadas. Tras esto se comunican las decisiones tomadas a los jóvenes, que no tienen capacidad de réplica: la resolución de los ancianos es inapelable. Sin embargo, el consejo de ancianos quedó ocupado por magi dementes tras la catástrofe, por lo que la alianza está gobernada por sus desvaríos.
Cultura
Cualquier magus puede ingresar en Laminium. El consejo de ancianos solo pide a cambio que consiga una nueva fuente de vis y jure plasmar todo el conocimiento adquirido (al inventar un nuevo hechizo, encantar un objeto o escribir un libro) en un menhir que disponga del espacio suficiente como para albergarlo por completo (cuando los menhires se acaban, los ancianos hacen traer una nueva piedra a la isla para tallarla, a veces desde lejanas canteras). Estos son los dos únicos requisitos para ingresar en la alianza, y han permanecido invariables desde su fundación.
Cuando un miembro de Laminium cumple los ochenta años desde su Desafío, pasa a formar parte del consejo de ancianos. Si ya tiene esa edad al ingresar en la alianza, es admitido en el mismo de forma inmediata.
Cuando un miembro de Laminium cumple los ochenta años desde su Desafío, pasa a formar parte del consejo de ancianos. Si ya tiene esa edad al ingresar en la alianza, es admitido en el mismo de forma inmediata.
Bienes
Las abundantes fuentes de vis de Laminium llevan abandonadas más de diez años, por lo que Issah comenzó a recolectarlas cuando supo que nadie las
estaba explotando. Los ancianos parecen haberse olvidado de ellas y los jóvenes no saben de su existencia.
Aunque en 1214 un Boina Roja les trajo un comunicado anunciando que si no explotaban las fuentes de vis de Ruidera alguien podría reclamarlas, Anas lo despachó a picotazos y, furibundo, echó la carta al agua.
Historia
Laminium fue la primera alianza fundada íntegramente por miembros de la Casa Ex Miscellanea, apartada de los hombres y la Orden. Desde su creación, la alianza no ha tenido representación política alguna en los Tribunales y, durante años, los Boinas Rojas solo la han visitado para comunicarles la celebración de los Tribunales ordinarios. Su participación en la vida hermética de Iberia ha sido tan escasa que en la actualidad hay magi que ni siquiera conocen de su existencia. Laminium siempre ha estado rodeada de cierto misterio y, en toda su historia, sus miembros solo han acudido al Tribunal de 1012, donde votaron a favor de la escisión de al-Ándalus.
Hace poco más de diez años, el consejo de la alianza decidió llevar a cabo un ritual para aumentar el poder del aura. Tras su ejecución, el tejido de la regio no experimentó ningún cambio, pero al cabo de un año sus habitantes sufrieron una sacudida mágica que les hizo entrar en Crepúsculo (en algunos casos de forma indefinida) y les arrojó, junto con los edificios de la alianza, al último nivel de la regio (ver su descripción más abajo). Los magi que no perdieron la cordura en el proceso descubrieron que dicho nivel tenía un aura de 9 y estaba aparentemente deshabitado, por lo que lo celebraron por todo lo alto. Sin embargo, en 1214, el nivel sufrió lo que los ancianos de la alianza denominan una pulsación y uno de los magi y su sanctum desaparecieron sin dejar rastro. La cosa empeoró cuatro años después, cuando en una segunda pulsación apareció una enorme sierpe de niebla y los magi tuvieron que huir del último nivel de la regio para salvar sus vidas.
Los ancianos llevan intentado regresar al último nivel desde 1218, ya que es donde se encuentra la alianza, pero como no cuentan con ningún guía, no pueden acceder al mismo. Además, aunque su pretensión era quedarse en el nivel inmediatamente inferior, resultó ser extremadamente peligroso, por lo que los magi se vieron obligados a malvivir en las ruinas que quedaron tras la catástrofe, en el nivel tres de la regio. Los ancianos esperan que en 1222 (cuando debería producirse la siguiente pulsación) desaparezca la sierpe y se abra una puerta al último nivel de la regio, para lo que no han dejado de rezar y sacrificar animales a sus antiguos dioses.
Pero estas no son todas las desgracias de Laminium, pues, desde hace pocos años, la alianza toledana de Issah ha comenzado a robarles las fuentes de vis que los ancianos dejaron de recolectar tras la catástrofe.
Hace poco más de diez años, el consejo de la alianza decidió llevar a cabo un ritual para aumentar el poder del aura. Tras su ejecución, el tejido de la regio no experimentó ningún cambio, pero al cabo de un año sus habitantes sufrieron una sacudida mágica que les hizo entrar en Crepúsculo (en algunos casos de forma indefinida) y les arrojó, junto con los edificios de la alianza, al último nivel de la regio (ver su descripción más abajo). Los magi que no perdieron la cordura en el proceso descubrieron que dicho nivel tenía un aura de 9 y estaba aparentemente deshabitado, por lo que lo celebraron por todo lo alto. Sin embargo, en 1214, el nivel sufrió lo que los ancianos de la alianza denominan una pulsación y uno de los magi y su sanctum desaparecieron sin dejar rastro. La cosa empeoró cuatro años después, cuando en una segunda pulsación apareció una enorme sierpe de niebla y los magi tuvieron que huir del último nivel de la regio para salvar sus vidas.
Los ancianos llevan intentado regresar al último nivel desde 1218, ya que es donde se encuentra la alianza, pero como no cuentan con ningún guía, no pueden acceder al mismo. Además, aunque su pretensión era quedarse en el nivel inmediatamente inferior, resultó ser extremadamente peligroso, por lo que los magi se vieron obligados a malvivir en las ruinas que quedaron tras la catástrofe, en el nivel tres de la regio. Los ancianos esperan que en 1222 (cuando debería producirse la siguiente pulsación) desaparezca la sierpe y se abra una puerta al último nivel de la regio, para lo que no han dejado de rezar y sacrificar animales a sus antiguos dioses.
Pero estas no son todas las desgracias de Laminium, pues, desde hace pocos años, la alianza toledana de Issah ha comenzado a robarles las fuentes de vis que los ancianos dejaron de recolectar tras la catástrofe.
Demografía
Los magi de Laminium
El consejo de ancianos
El miembro más decano de Laminium es Anas Bjornaer, un magus de más de cien años cuya bestia interior es un pato colorado. Hasta la catástrofe, Anas migraba todos los inviernos al norte de África, pero desde que se viera arrojado al Crepúsculo no ha abandonado la alianza ni su forma de pato y está claramente trastornado. Anas habita las ruinas del nivel tres de la regio y va de un lado para otro vigilando a los miembros de la alianza, diciéndoles qué tienen que hacer y cómo. Anas ya no estudia, simplemente se pasa los días amonestando con su voz aguda a sus sodales.El siguiente magus de más edad es Pedro Ruiz de Tytalus, un hombre ambicioso que llegó a Laminium huyendo de los almohades de al Ándalus con la idea de revitalizar la alianza y hacerse con su control. Con poco acierto, convenció a los ancianos para mejorar el aura con uno de sus hechizos, lo que acabó desestabilizando la regio y causando la catástrofe de la que tampoco salió indemne. Cuando regresó del Crepúsculo, Pedro no sabía lanzar hechizos y su personalidad había quedado trastornada. Desde aquel momento, se pasa el día al sol y duerme al abrigo de las cañas, en el río. Solo habla si se le pregunta, aunque en dichas ocasiones parece mostrarse lúcido e incluso razonable.
La siguiente maga en edad es Sol Ex Miscellanea. Sol es una saḥira y era la encargada de traer las nuevas piedras para el bosque de menhires. Ella las tallaba y también se ocupaba de preservar sus escrituras. Desde la catástrofe, su Crepúsculo la dejó fuera de sí. Ahora, Sol tiene que ser asistida por los habitantes de la alianza, ya que no puede comer ni andar sola. Sol únicamente habla cuando se convoca el concilio, al que, como el resto de ancianos, acude sin demora.
Muŷāhid Ex Miscellanea es el último anciano de Laminium y, como sus compañeros, también resultó gravemente afectado durante el Crepúsculo que sufrió durante la catástrofe. A primera vista, no parece haber perdido facultades, sigue trabajando en su ruinoso laboratorio, no desatiende sus quehaceres (como encender la fogata en la isla central que marca el inicio del consejo de ancianos) y sigue escribiendo sus investigaciones en los menhires. Sin embargo, algo en su percepción se ha trastocado: Muŷāhid reverencia a Anas como a un dios. Ha levantado altares en su nombre y venera su forma de pato hasta el punto de postrarse cuando Anas le dirige la palabra.
Los jóvenes de Laminium
Los jóvenes de Laminium viven en las ruinas de la alianza del nivel tres de la regio. Sin apenas recursos y liderados por unos ancianos seducidos por el Crepúsculo, buscan la manera de subsistir, cada uno a su manera.Nuʿum Ex Miscellanea es la mayor de los jóvenes, una antigua aprendiza de Sol. Nuʿum no estaba en la regio durante la catástrofe, se encontraba en Medina, escuchando cantar a un juglar las gestas de mio Cid, adonde había acudido a lomos de su corcel Babieca. A Nuʿum le encantan las historias de caballería, de hecho, ella misma viste como un caballero y en las noches de verano suele cantar las hazañas del Cid al resto de los habitantes de la alianza.
Desde la catástrofe, Nuʿum está al cargo de su hermana hermética, Buayna, a quien cuida y provee de todas las atenciones posibles. Esta responsabilidad es en parte la causante de que Nuʿum no pueda dedicarle tanto tiempo a la alianza como quisiera. Además, la catástrofe cortó de raíz las negociaciones que estaba llevando a cabo con uno de los yinn que moran en el humedal de la alianza. Después del suceso, no ha podido volver a invocar al espíritu mágico y está empezando a sospechar que haya podido ser afectado de alguna forma por las pulsaciones de la regio o, aún peor, que se haya marchado. En cualquier caso, sabe de la existencia de otros yinn de menos poder con los que puede contar para realizar otras tareas menores.
En la actualidad, Nuʿum no se plantea abandonar la alianza precisamente por su hermana, a pesar de la precariedad en la que vive. De hecho, hace dos años realizó su ritual de longevidad, que sabe que no aguantará bien el paso del tiempo, y se vio obligada a destilarlo entre las ruinas de los edificios de la alianza, en un laboratorio improvisado. Por el momento no es algo que le preocupe, pero tarde o temprano, si no consigue revitalizar Laminium, se verá obligada a marcharse y llevarse a Buayna con ella. Al fin y al cabo, fue la única que salió indemne de la catástrofe, por lo que la responsabilidad de sacar a flote la alianza recae sobre sus hombros.
La hermana hermética de Nuʿum, Buayna Ex Miscellanea, no tuvo tanta suerte. La catástrofe destrozó su mente, como ocurrió a los ancianos, y desde entonces no ha dejado de repetir lo que estaba haciendo aquella noche: se pasa los días destilando un brebaje en las ruinas del que fuera su laboratorio.
El resto de jóvenes, Ibn Muŷāhid Ex Miscellanea, Yulyān ibn Muŷāhid Ex Miscellanea y Clypeata Bjornaer, no resultaron afectados por la catástrofe más que superficialmente y, aunque tienen sus peculiaridades, viven su día a día entre las ruinas que les legaron sus ancianos, acondicionando una alianza que, con el tiempo, podrían devolver a la Primavera. Sin embargo, al no conocer prácticamente nada de sus recursos (pues son cosas de los ancianos), no recogen más que la vis de la que tienen conocimiento, que es la que está en el interior de la regio.
Territorios
Laminium se encuentra en el impresionante humedal de la confluencia de los ríos Guadiana y su afluente, el Cigüela.
La regio de Laminium
La regio donde se encuentra Laminium tiene cinco niveles, a los cuales solo se puede acceder si se cuenta con un guía. El nivel mundano llega hasta la vega del río y es la puerta de acceso al siguiente nivel, donde existe un aura de poder 3. El tercer nivel tiene un aura de poder 6 y es donde se encuentran las ruinas de la antigua Laminium, ahora habitadas por los magi, que no son más que un reflejo de los edificios que existían antes de la catástrofe mágica. El cuarto nivel era el último antes de la catástrofe, y los fundadores lo evitaban por considerarlo muy peligroso debido a los seres que lo pueblan. En él se reflejan los dobles brumosos (edificios, criaturas y plantas) del último nivel de la regio, que en ocasiones poseen una cierta corporeidad. El quinto y último nivel apareció tras la catástrofe y cuenta con un aura de poder 9. Es aquí donde, tocados por una densa niebla, se encuentran los edificios de Laminium. Cada cuatro años, este nivel sufre una pulsación que hace desaparecer o aparecer algo en sus confines.Infraestructura
Construida en el último nivel de una poderosa regio mágica, Laminium tiene edificios dispersos entre el agua y las islas que salpican el humedal.
Laminium no cuenta con edificios de uso común; sus miembros siempre han celebrado sus concilios en la explanada de la isla central de la regio, donde levantaron un menhir tallado con los nombres de sus dioses celtas. Del mismo modo, todos sus avances, sus textos de laboratorio y sus libros herméticos, los fueron tallando en rocas que trajeron para tal fin, por lo que, en sus casi cuatro siglos de existencia, la isla central se ha convertido en un bosque pétreo repleto de sabiduría.
Laminium no cuenta con edificios de uso común; sus miembros siempre han celebrado sus concilios en la explanada de la isla central de la regio, donde levantaron un menhir tallado con los nombres de sus dioses celtas. Del mismo modo, todos sus avances, sus textos de laboratorio y sus libros herméticos, los fueron tallando en rocas que trajeron para tal fin, por lo que, en sus casi cuatro siglos de existencia, la isla central se ha convertido en un bosque pétreo repleto de sabiduría.
Fecha de fundación
1012
Tipo
Geopolitical, Magocracy
Nombres alternativos
Laminio, Laminiel
Predecessor Organization
Sistema de Gobierno
Gerontocracy
Organización a la que pertenece
La ciudad perdida
La poderosa aura del lugar, sin contar con los dramáticos accidentes mágicos que la han sumido en el Crepúsculo, tiene su origen tanto en la sublime belleza natural de los humedales como en la ubicación de la perdida ciudad de Laminium. El devenir de los tiempos ha llevado a que aquellos que recordaban alguna leyenda sobre la ciudad hace tiempo que abandonaron esta tierra, tanto frontera como desierto, y la última memoria sobre la ciudad perdida se ha esfumado. ¿Qué llevo a esta opulenta urbe a quedar sumida en el olvido y a que sus cimientos se hundan ahora en las turberas cubiertas por las aguas?
Comentarios